Para Jackie Guerrido –que se encuentra apoyando a Don Omar en su juicio por drogas y armas– es un honor que la bauticen en la Isla y Estados Unidos como la “Primera Dama del Reggaeton”.
La conductora del tiempo del programa “Despierta América” (Univisión) –donde nació ese seudónimo–, que se ha presentado regia durante los tres días del juicio al Tribunal de Primera Instancia de Carolina, siente que “ese título hay que llevarlo con la frente en alto porque es un género que nació en Puerto Rico y se ha internacionalizado”.
“Para mí es un orgullo porque forma parte de personas que vienen de un sueño y que han llegado bien alto. Y qué bonito que la gente sepa destacar y sepan reconocer que estos muchachos han caminado a base de mucho sacrificio y esfuerzo”.
Hay que destacar que una primera dama es una mujer distinguida casada con el jefe de Estado o gobierno, y en su caso es con el rey del reggaeton, Don Omar.
“Esto de la “Primera Dama del Reggaeton” lo veo como cuando se quiere, se puede. Los sueños se hacen realidad cuando se trabajan bien fuerte. Y más cuando viene de mi país Puerto Rico. Y si el reguetón viene de Puerto Rico y ser la “Primera Dama del Reggaeton” puede identificarme como una mujer puertorriqueña y luchadora, pues bienvenido sea. Y con el permiso de Ivy Queen que ésa es la mera, mera… (ríe)”, detalla.
Este pasado lunes, cuando inició el caso, Jackie Guerrido apareció en la corte junto a su esposo con un elegante suit blanco de falda y chaqueta, ajustado a su esbelta figura con un cinturón. La moda era al estilo de la ex primera dama de Estados Unidos Jacqueline “Jackie” Kennedy Onassis.
El martes lució una chaqueta y pantalón con camisa blanca de la prestigiosa línea de diseñadores Neiman Marcus. La cartera cuadrada color vino es un diseño de Cartier y los zapatos negros y dorado de Versace.
Ayer, miércoles, Jackie Guerrido estuvo ataviada con falda y chaqueta color gris, cuyo costo y diseñador no pudo precisar. El calzado era de Christian Louboutin y el bolso gris de Gucci. Las gafas oscuras Chanel no faltaron en sus lujosos atuendos, cuyo costo -entre cartera, zapatos y ropa- asciende a los $3 mil.
Don Omar es su prioridad
Jackie Guerrido siente como algo normal apoyar incondicionalmente a su media naranja en la primera prueba que les ha tocado enfrentar como matrimonio.
Su prioridad como mujer y ser humano es respaldar a su enamorado, con quien contrajo nupcias el 19 de abril de este año con tremendo bodón en Puerto Rico.
Es consciente de que en cada matrimonio hay pruebas a diario y, por ende, apoyar a su compañero es su prioridad como esposa y ser humano.
“Mi trabajo es una necesidad y mi familia una prioridad. Por lo tanto, estoy aquí con él como voy a estar mañana como voy a estar siempre. Pienso que el apoyo familiar siempre tiene que estar ahí indiscutiblemente cuando eres conocedora de la verdad”, sostiene.
Para ella el apoyo debe ser incondicional, porque “pienso que hoy es él y mañana voy a ser yo. Mi apoyo no lo veo como algo del otro mundo. Lo veo como algo que uno tiene que hacer como esposa”.
Tanto es su compromiso con su esposo que lamenta no poder acompañarlo en el juicio la semana entrante por tener que cumplir con su trabajo en Miami, Florida.
“Se me parte el corazón de tener que irme a trabajar y que haya un receso entre nosotros, porque lo tengo que hacer porque hay un contrato. Él también me dijo: ‘Regresa a tu trabajo y cumple con tus obligaciones’”, dice.
Sin temor al jurado
No le provoca temor saber que 12 personas decidirán el destino de su marido, porque “en mi vida no existe el miedo porque no veo que la palabra final está en manos de esas personas, sino que veo que está en las manos de Dios”.
“Y Dios sirve para iluminar a esos 12 jurados, al juez y al fiscal… Estamos bajo un ojo y una mano que tiene más poder que cualquier persona y que sí está viendo la verdad. Y está muy claro de todo lo que está pasando”, manifiesta.
Pese a la confianza y complicidad que hay entre ella y su pareja, reitera que no le ha dado consejos previo al proceso judicial.
“Es una persona con la que comparto la misma visión. Él es una persona con muchísima fe y coincidimos en nuestra forma de pensar. Y tomamos esto con buen sentido del humor. No he tenido que darle consejos. Supertranquilos estamos y necesitamos paciencia. Ansiosos no estamos, pero sí cansados”, afirma.
No es celosa
Asegura que no puede ponerse celosa por las fans de Don Omar, porque “no me conviene que él se ponga celoso también conmigo (bromea)”.
“Creo que todas esas mujeres estuvieron primero que yo. Y gracias a ellas que lo llevaron a ser lo que es hoy día, es que lo pude conocer. Así que ellas están primero y yo las respeto, como me han respetado a mí”, recalca.
Disfruta mucho que la fanaticada la salude en la calle con un beso o sonrisa. “Todavía no me he encontrado alguna que me haya hecho un desaire”, acota.
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